RAQUEL Y OTRAS COSAS

Cuando tenía pensado empezar esta entrada quería hablar de Raquel, una antigua amiga mía, hace mucho tiempo que no la veo, hará dos años, o por ahí. Pero conforme ha pasado el día, me he dado cuenta que hablar de ella sería demasiado presuntuoso, o no, no lo sé, pero lo cierto y verdad es que quiero hablar de ella, pues ahora, y cada vez más me siento identificado con ella, y a la vez hablaré de otras cosas.

Raquel era una amiga mía, y creo que lo es, lo que pasa que hace tiempo que no la veo, pero bueno yo os voy a hablar de la época en la que nos veíamos con más frecuencia, era la época de 2001 y 2002, hará 10 años más o menos, por ahí, por esa época. Raquel era una tía que se juntaba en nuestra pandilla de amigos. En realidad ella no tenía muchas amigas, y sí muchos amigos, pues era bellísima, guapísima, una morenaza de infarto, guapísima, alta, más alta que yo, pero su altura no desentonaba, o sea no era fea su altura, al contrario, le daba más belleza aún. Sólo tenía dos amigas, Pili y Elena, eran las únicas que la aguantaban, pues se llevaba a todos los tíos que quería, era guapísima, es lo cierto, era guapísima, era una modelo. De hecho, su mote era la modelo. Yo como todos caímos en sus redes de persuasión, así lo veíamos nosotros, y le entramos, pero ella decía con educación y tacto, que NO. Yo solo le habré conocido y creo que sólo ha tenido dos novios. Pero a lo que voy, la pandilla era amplia, seríamos 10 o por ahí, tres tías, Raquel, Pili y Elena y el resto de tíos, y lo que quiero decir que se nos conocía pues como siempre iba Raquel, a sitio que pasábamos todo el mundo se nos quedaba mirando, se nos conocía bien por Ciudad Real. Ella por aquella época estaba soltera. Y en esos dos años de borracheras y juergas la susodicha Raquel se sinceraba con el resto de la pandilla,  y nos decía que ser tan llamativa era un problema, pues todas las tías le tenían envidia y la intentaban joder, también nos contaba que no podía tomarse un café con un conocido o amigo o algo parecido, pues si quedaba con él, este se pensaba que ella quería ligar. O sea lo que quería decir o trasmitir la chica era que sí, vale, ser guapo te abre muchas puertas, te hace las cosas mas fáciles, pero también tienes que medir mucho lo que dices, haces y comentas. Es cierto, llevaba razón, yo por aquel entonces no la entendía, pero llevaba razón, ser llamativo, guapo y demás es bueno, punto, pero como todo, tiene su lado negativo, y es que tienes que medir mucho lo que dices, cómo lo dices, y que haces y como lo haces. 

Esto me lleva a pensar y ha decir y ahora explicar que como yo he dicho en muchas ocasiones he pasado en dos meses, en dos meses, y lo que me queda, de pasar del cese de negocio al todo vendido, ahí está la cosa, muchas veces por este cambio tan repentino y lo que me queda, no pillo muchos mensajes, señales, no me acostumbro, ha sido un cambio, y lo que me queda, muy grande y rápido. Resumiendo no estoy todavía acostumbrado, aunque me voy acostumbrando a ser lo que soy y lo que seré.