martes, 20 de septiembre de 2011

A SU IMAGEN Y SEMEJANZA

La noche fue rara, y la mañana me está resultando un poco extraña. Sale el sol, yo aquí esperando. Las cosas pasan según pasan, nosotros a veces hacemos algo, y otras veces lo hacemos todo. Pero no te preocupes, sabes perféctamente que pronto llegará el sueño dorado de saber que todo no se volverá al revés. Sé que mi vida, tu vida, la vida de ellos, son nuestras, son de cada uno de nosotros, somos los reyes, los amos de las vidas de cada uno de nosotros. Recuerda amigo, recuerda amiga, no eres la única persona de este mundo que no sabe que hacer, eres lo más grande que ha parido madre, eres lo más bonito que recuerdo ver. Pero la vida sigue, sigue su ritmo, sigue sin decir a donde va, nos engaña, sabemos que mañana el sol saldrá, que tú saldrás, y que yo saldré, siempre y cuando todos los astros de la tierra, del cielo, lo permitan. El miedo de un Dios todopoderoso siempre anida en la casa del pobre, siempre está ahí, siempre nos amenaza, pero ahí estamos nosotros para decidir que camino cogemos, si queremos perdernos, si queremos encontrarnos. La vida amigo es un contrato civil, entre tú y el presente, no todo depende de ti, no todo depende del presente. Pero intenta meterle cláusulas que dependan solo y exclusivamente de ti. Sé que los cambios no son fáciles, ni a mejor, ni a peor, pues se tienen que asumir, se tienen que ver con la perspectiva del tiempo, pero haz de ver, de entender que así eres, que lo de antes era una mala, muy mala réplica de mi persona. Pero tienes que ver, tienes la obligación de ver que la vida es como es ahora amigo, no debes renunciar a tu cargo, a tu presidencia de apoderado del contrato de tu vida.

No sé si me estás entendiendo, pero también me gustaría decir, escribir, y expresar que se puede y se ha de perdonar setenta veces siete, a quién tu quieras, y que para abrir unas puertas se han de cerrar otras. Yo ayer ya cerré todas las puertas que se me quedaban abiertas en el pasado y ahora lo que más deseo es vivir, conocer a gente nueva, crecer , sentir y vivir, como siempre me ha gustado vivir. Pues si te quedas en el pasado, nunca saldrás de ahí, siempre estarás en un bucle, siempre estarás preso de tus pensamientos pretéritos. Sé lo que me pasa, sé lo que siento, sé lo que me está sucediendo. Son muchos cambios, tanto físicos como psicológicos, conócete a ti mismo rezaba en Delfos, pues eso, tengo que conocerme a mi mismo. Ya que con tantos cambios no me da tiempo a conocerme a mi mismo, tengo que vivir, divertirme, conocer a gente nueva, y sobre todo a conocerme a mi mismo, ir más rápido que mis cambios, ir más rápido que mis recuerdos.

Solo tengo una cosa que decir, sólo tengo una cosa que ver, solo tengo una cosa que recitar, solo tengo un método que hacer, solo tengo que recitar, solo tengo que ver, que mi vida es una cosa maravillosa, como lo es la tuya, como la es de ese señor, como lo es la de esa señora que ahora mismo esta pasando por la calle, paseando a su perro, quizás por que esa señora, está pasando ahora mismo por la calle.

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